Casi 40 años después de su muerte, el pasado diciembre se inauguró en New York el proyecto que Louis Kahn, uno de los más relevantes arquitectos estadounidenses (aunque de origen estonio) del siglo XX, realizó para el Memorial Franklin Roosvelt en la isla de Manhattan bajo el nombre «Four Freedoms Park»

Se trata de un parque diseñado originalmente un año antes del fallecimiento del artista, que no pudo erigirse por motivos de financiación, y que ha sido construido ahora gracias a la iniciativa ciudadana.

La obra se sitúa sobre el vértice sur de la Isla Roosvelt, sobre el East River, rematando la misma con un diseño en «proa de barco» flanqueado por 2 filas de árboles y coronado con un mirador cuadrado realizado, tal como indicaba el proyecto, básicamente en granito, y que, dominado por la escultura del presidente americano, trata de enmarcar la vista sobre el lado este de New York ofreciendo un espacio de descanso y tranquilidad al visitante.

La solución resulta ciertamente evocadora y sin duda, la búsquedad de la fugacidad y el horizonte que se materializa en el objeto arquitectónico recuerda a otras obras representativas del autor como los laboratorios del Salk Institute.

Abierto de jueves a domingo, de 9’00 a 17’00h., es sin duda un aliciente más para visitar la ya de por sí atractiva Gran Manzana.